UN DAÑO QUE VA MAS ALLÁ DE LO MATERIAL

Hay dolor, bronca, frustración y tristeza en un grupo de gente que con esfuerzo le dedicó horas a una obra que mejoraría la infraestructura del Club Atlético Libertad.

Una inversión millonaria con casi seis meses de arduo trabajo, se fueron en minutos por la borda, debido a que delincuentes de baja calaña decidieron robar el cableado que se había colocado para iluminar las cancha de hockey y de fútbol 9 en el Polideportivo rojo. Se extendieron 180 metros de cable y se colocaron cinco palmeras. Se realizó un intenso trabajo de zanjeado, para que un insensible social, destruya el sueño de progreso del club.

Hay bronca por ese daño, que no sólo es material. Permanentemente se dice que el deporte aleja a los chicos de la calle, les brinda contención, ayuda a solcializar y sin duda fortalece la salud física y mental de los chicos en todo el proceso evolutivo.

Si..CHICOS! pequeños y adolescentes que encuentran en estas instituciones, la oportunidad de hacer deportes. Pero hay gente que le importa un comino estas cosas, y se dedican a hacer daño como el que provocaron. Sepan que son lo mas miserable y bajo de la sociedad. No hay NINGÚN JUSTIFICATIVO para lo que han hecho. Agarrar una pala, pedir trabajo o vender alguna baratija es mucho mas digno que robar.

Si alguien dedicado a la reducción de metales a nivel local tiene algo de moral, debería informar la identidad de estos cobardes rateros. Perdón por estos adjetivos calificativos de este artículo, pero cuando una institución (cualquiera sea) sufre este tipo de hechos, genera indignación, bronca e impotencia. 

Libertad lamenta y sufre este daño, y esperemos que la justicia sea terrenal o Divina, haga su trabajo con estos malvivientes.